El juez Carlos Alberto Besi, condenó a Roberto Darío Ortiz a la pena de seis meses de prisión por ser autor del delito de robo simple en grado de tentativa manteniendo su condición de reincidente y disponiendo la prisión preventiva que se encuentra cumpliendo el imputado hasta tanto la sentencia se encuentre firme.
El juez de audiencia, Carlos Alberto Besi, condenó hoy a Roberto Darío Ortiz a la pena de seis meses de prisión por ser autor material y penalmente responsable del delito de robo simple en grado de tentativa (artículo 164 del Código Penal), manteniendo su condición de reincidente y dispuso mantener la prisión preventiva que se encuentra cumpliendo el imputado hasta tanto la sentencia se encuentre firme.
La resolución de Besi fue a raíz de un pedido de juicio abreviado acordado por el fiscal Facundo Bon Dergham, el defensor oficial Pablo Maldini y el propio Ortiz –un albañil de 25 años–, quien admitió la autoría del hecho, y fue dictada apenas 19 días después de cometido el delito.
En la investigación fiscal preparatoria quedó demostrado que el 28 de enero pasado, a media mañana, el imputado ingresó a una vivienda de la calle La Rioja, después de dañar el vidrio y la persiana de una ventana, y fue sorprendido y aprehendido por la policía en esas circunstancias, que concurrió al lugar por el aviso de un vecino. Fue detenido cuando tenía un destornillador y estaba oculto debajo de una cama.
En el fallo, Besi dijo que “en base a lo expuesto y al análisis probatorio, se desprende que hubo por parte de Ortiz una intención manifiesta de apoderarse de bienes ajenos (dolo), con un comienzo de ejecución y la falta de consumación por circunstancias ajenas a su voluntad, no habiendo logrado apoderarse de bien alguno”.
Finalmente, el juez le mantuvo a Ortiz la condición de reincidente ya que el juez de control, Fernando Rivarola, lo había condenado el 11 de noviembre de 2014 a la pena unificada de cinco años y ocho meses de prisión –la condena anterior le había sido impuesta por la Cámara en lo Criminal 1 a mediados de 2010– y esa pena quedó agotado el 21 de agosto del año pasado.
El legajo lo inició la fiscala María Cecilia Martiní a través del procedimiento de juicio directo porque el imputado fue detenido in fraganti.