El vicepresidente primero de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de La Pampa, Jorge Ortiz Echagüe analizó la situación en la ciudad luego de las nuevas medidas económicas. Alertó por el aumento de la venta ambulantes y reconoció que hay menores ventas en la ciudad.
El vicepresidente primero de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de La Pampa, Jorge Ortiz Echagüe, trazó un panorama de la situación comercial en la provincia.
En primer término se refirió a la venta ambulante en Santa Rosa y General Pico y analizó que “desde la Cámara siempre ha sido una preocupación y la realidad es cuando se minimizan los controles, observamos que la venta ambulante aumenta”, dijo al programa radial y televisivo “Tiene Sentido”, que se emite por Somos La Pampa – Cablevisión y es conducido por Carlos Monasterio.
“Siempre hemos insistido que es un tema que se puede manejar, pero si no lo hacemos, en el futuro se tornará inmanejable, como ha pasado en otras ciudades”, expresó.
Ortiz Echagüe reiteró que la forma que hay que trabajar es en la denuncia y el decomiso de mercadería al detectar la venta ambulante. “En Santa Rosa tenemos un problema adicional que una ordenanza de hace unos años, convirtió a la venta ambulante en puestos fijos, para lo cual presentamos el año pasado una ordenanza y ver si se puede volver a impulsar esa ordenanza”, expresó.
El vicepresidente de la Cámara expresó que se reunió con el Secretario de Gobierno de la municipalidad, Román Molin y dijo que la norma quiere achicar a dos puestos fijos por cuadra y que solo se pueda vender producción local y artesanal, que reduce la posibilidad de la venta ambulante, además de impulsar a los artesanos locales.
“Siempre es una preocupación para la cámara y en el tema de los vendedores ambulantes vamos a ser inflexibles. Eso no quiere decir que tengamos resultados, porque no somos el poder de policía, que es el municipio”, aclaró.
—¿Cuál es el análisis de la actividad comercial?
—Depende el rubro, pero Según la información que nos llega de distintos comerciantes y consultas que hacemos, este no es el mejor momento, con un estancamiento de la economía. Somos conscientes de que hay precios nuevos y aclaramos que no somos los formadores de esos precios.
Hay precios nuevos con salarios viejos y eso produce menos venta, salvo los rubros específicos de la época, que son los relacionados con la vuelta al colegio.
—¿Se observa desempleo?
—No en grandes escalas. Podrá haber un caso puntual, pero hay que esperar y los datos recién se tendrán alrededor del 25 de este mes.
—¿Se interrumpió el Programa de Precios Cuidados en La Pampa?
—No sabemos. Asistimos a un par de reuniones para relanzarlo, ponerlo en marcha, modificar precios, cambiarle el nombre y nosotros estamos a la espera. Somos el nexo con el comerciante y debemos ponernos de acuerdo con él, para acordar márgenes de comercialización, algo que hemos hecho, pero falta la otra parte de ver cuáles son los productos, de ver cuáles son los fabricantes y eso corresponde al Ministerio o UNILPA, pero no sabemos cómo está la situación.
—¿En qué quedó la intención de hacer un centro comercial a cielo abierto en Santa Rosa?
—Por ahora en nada. Hubo una licitación para adquirir materiales, que se hizo sobre finales de la gestión anterior y el Concejo Deliberante desactivo. Hemos hablado con el intendente actual y por ahora esto quedó en nada, porque ellos dicen que tienen otras prioridades, que son razonables. De hecho, en la reunión de hoy de 1350 participantes, viene gente del municipio de Santa Rosa.
—¿Cuál es la situación del precio de los alquileres de locales en Santa Rosa?
—Lo hemos discutido mucho, pero eso depende de la oferta y la demanda. El que pone el precio final es el dueño del local y el mercado. En este momento, los precios han bajado. Hay ofertas, negocios que se reubican y varios que cierran, sobre todo los cuenta propistas.
Creo que hay un proyecto de regulación del mercado, pero nosotros no estamos convencidos de eso. En cualquier actividad la regulación produce no inversión y va a ser peor el remedio que la enfermedad, ya que habrá menos locales, con alquileres más costosos.