Por Silvio Tejada.
Que mis pies se forman en pantuflas de goma
hipocampo somos
mi liberty and me
me sumerjo como submarino
la plataforma es enlodada
patinosa ensalada para nuestras ruedas de goma
hipo campo en la respiración
me saludan desde el muelle
hipo campo en el fuelle de la inundación
los he visto frente al cuenco
pozo enterrado en turbias aguas
ni el grafiti contra la yuta se ve
la pared del club sarmiento es solo un aliento
inundado
la costurera inundada
y metido ya como un hipocampo hasta mi cintura escamada
empujando las ruedas para llegar a la fangosa terraza en que hago pie
apareciendo mis dedos, la planta firme entre el verdoso resbaloso
la rueda también aparece y camino selvático
y en la esquina me encuentro con los lentes de un periodismo a la espera de la entrega de lavandina o la visita de algún funcionario mientras un textual refiere cuando me ve, «un poeta anegado», remarcando la sutileza de su verborragia. Saludo a un compa fotógrafo que sostiene que aquí no se ensucian los zapatos y se va del lagrimal arroyo emergente
me pongo las zapatillas me subo a la bici
y voy dejando atrás que fui un hipocampo para ver si estaban bien mis hermanes y mi sobrino del alma
hipo
hipo
hipo
Photo tito m