En el día de ayer (18/05), a las 8.30 de la mañana, por orden del Juzgado Federal de Santa Rosa La Pampa, se procedió a realizar la demarcación de enterramientos NN en el cementerio de la localidad de La Adela.
Concurrió la Fiscalía Federal a cargo de Iara Silvestre, acompañada de dos colaboradoras; y el Dr. Franco Catalani en representación de la Secretaría de DDHH de la Nación y del Movimiento Popular Pampeano de DDHH.
Asimismo, asistieron funcionarios municipales y oficiales de la policía provincial que prestaron distintas colaboraciones.
El lugar quedó demarcado y resguardado a la espera de nuevas medidas judiciales. Se espera poder lograr en breve la concurrencia del EAAF, a fin de la extracción e identificación de muestras.
La denuncia
Un trabajador del cementerio de La Adela denunció durante los juicos a exrepresesores que actuaron en la subzona 14 durante el terrorismo de estado, denunció que en la dictadura enterraron a seis personas como NN. Pidieron preservar el lugar para darle intervención al Equipo de Antropología Forense y ayer la justicia demarcó el lugar.
Un hombre que trabajaba en el cementerio de La Adela durante la última dictadura militar declaró ante la fiscalía federal de Santa Rosa que durante la dictadura militar enterraron entre cinco y seis personas en forma anónima, como NN, y señaló el sitio exacto donde ocurrió esa situación.
La declaración fue considerada por militantes de derechos humanos como una «prueba contundente» de los enterramientos clandestinos que hubo en esa localidad y que habían aparecido mencionados tangencialmente en el primer y segundo juicio de la Subzona 14.
Desde el Movimiento Popular Pampeano por Los Derechos Humanos y las querellas en el Juicio de Lesa Humanidad de la Subzona 14 informaron que el viernes 25 de septiembre de este año se tomó declaración testimonial a un hombre que fue empleado municipal en La Adela, quién se desempeñaba realizando tareas en el cementerio de esa localidad en la década del 70 .
Su declaración fue brindada ante el fiscal federal Leonel Gómez Barbela, con la participación del abogado de las querellas, Franco Catalani. Por razones de la situación sanitaria que se está viviendo, la declaración fue realizada en forma remota.
Esta declaración fue producto de la gestión realizada por el militante de derechos humanos Víctor Giavedoni que se contactó con el declarante hace ya casi dos años hasta obtener este resultado.
«Este operario dio precisiones contundentes acerca de los enterramientos que se realizaron en el Cementerio local en la modalidad NN , de al menos cinco o seis personas entre los años 1976 y 1978, y quedó señalado el lugar donde se realizaron las mismas», informó el movimiento.
La Justicia emitió una resolución de “no innovar”, a fin de preservar el espacio, y se promovió la actuación del Equipo de Antropología Forense a los efectos de determinar, en lo posible, la identidad de las personas allí enterradas .
«Si bien ya se tenían noticias acerca de estos hechos, la declaración testimonial del operario confirma en forma fehaciente que en La Pampa hubo enterramientos clandestinos durante el período de la última Dictadura Genocida, que se llevó la vida de treinta mil compañeros, de los cuales sus familias, amigos y la sociedad, siguen buscando saber que pasó y que hicieron con ellos y ellas», subrayó el movimiento.
«Desde el Movimiento y quienes participamos en estos juicios, fue un objetivo de mucho tiempo lograr este testimonio en sede judicial, porque entendemos que es el aporte de una prueba fundamental en el camino de la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia», señaló la organización.
«En este camino, aspiramos a que se obtengan nuevos medios de pruebas, se sepa qué ocurrió, de dónde provenían esos cadáveres, sus identidades, quién o quiénes participaron en sus desapariciones. Es nuestro compromiso no bajar los brazos hasta obtener certezas. No podemos bajo ningún punto de vista, resignarnos a no saber la verdad acerca de estos hechos», alertó.
Finalmente, el Movimiento remarcó que «conocer que hubo enterramientos NN en nuestra Provincia, y que pasaron más de 40 años de los mismos, representa un gran dolor, pero alivia pensar que quizá estemos comenzando a transitar el camino hacia la Verdad que de alguna manera, siempre nos hace libres».